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Selección Chilena

Una «Roja» sin «históricos» empató a un renovado México

La Roja empató con la selección mexicana sin jugadores históricos en el campo de juego. Buen partido de la Roja.

Los errores cuestan caro, y Chile tuvo esta madrugada unos pocos que le pudieron costar el partido. Sin embargo, los integrantes de esta «Roja», mezcla de jugadores que no habían debutado y otros con pocos partidos, como Suazo y Montecinos, entre otros, sacaron la tarea adelante.

Y aunque en este tipo de partidos no importa mucho el resultado, siempre es bueno para el ánimo de los protagonistas y de los hinchas que el resultado no sea adverso, sobre todo porque -en este caso-, el partido dista de ser malo o aburrido, y no contaba con los «históricos» en sus filas.

Y si bien se cometieron errores, apareció lo que más le gusta al hincha, y es la «garra» que les permitió a los jugadores revertir el mal resultado con el que había arrancado el partido, a pesar de que Chile estuvo a punto de abrir el marcador recién iniciado el partido.

México renovado

El rival de Chile también se presentó lleno de novedades, lejos de aquél histórico conjunto al que la Selección Chilena propinó una dolorosa derrota por 7 a 0 en la Copa América. No. Esta versión de México también llena de caras nuevas e interesantes.

Tanto así, que a los 9 minutos en un fulminante ataque pudo abrir la cuenta y dejó a Chile con la sensación de «qué pasó aquí», y que por largos minutos tuvo golpeada a la Roja.

La reacción

Sin embargo, la madrugada no estaba para derrotas, y a los 21′ los de camisetas rojas se fueron en demanda del arco mexicano, e Iván Morales, muy criticado por los hinchas por su irregularidad en su equipo, cabeceó en el área, obligando al meta cuate a esforzarse para sacar el balón, y dejarlo en el medio del área, por lo que en segunda instancia, Morales estiró la pierna y empujó el esférico para inflar las redes.

A contar de ese momento, los ataques y contraataque se sucedieron, con un Joaquín Montecinos qe virtualmente se «comió» la banda derecha y dejó loco a su cancerbero, que veía cómo pasaba por su lado el atacante nacional.

Sin lugar a dudas, Montecinos fue el jugador «distinto» de la noche -como dicen en la tele-, porque peleó todos los balones que pudo, intentó siempre ir adelante y se plantó con personalidad ante el pito hondureño, que quería más protagonismo que los jugadores.

Segundo tiempo

El segundo tiempo, a pesar de que ambos equipos se desordenaron en sus filas por los cambios que introdujeron ambos directores técnicos, el partido no perdió intensidad y permitió a ambos cuerpos técnicos probar las alternativas para sus equipos.

Chile no jugó mal, y lo cierto es que hay que afinar errores fundamentales, como por ejemplo, no despejar al centro de la cancha, donde en un par de oportunidades los chilenos dejaron a sus rivales solos, de frente al arco chileno, y el «Zanahoria» Pérez debió esforzarse para arreglar los desaguisados.

Una pelota detenida permitió a los cuates ponerse en ventaja a los 64′, oportunidad en que Jordan Silva conectó un cabezazo que cambió por gol. Era la ventaja, y la banca chilena se inquietaba.

En el equipo nacional hubo cambios en el segundo tiempo. Salió Montecinos y entró Cristán Zavala, . salió Marcelino Núñez por Víctor Méndez, también abandonó el campo de juego Iván Morales reemplazado por Diego Valencia, entró Ignacio Saavedra por Claudio Baeza, Ingresó Gabriel Suazo y abandonó Nicolás Díaz y también Bastián Yáñez por Clemente Montes.

Si bien es cierto, la segunda etapa fue un poco más baja, los jugadores se brindaron por el partido y el espectáculo, y Chile buscó siempre el arco contrario, y su premio llegó a los 86′, cuando Zavala llegó a la linea de fondo, centró al área, complementó Méndez y Pablo Parra la hundió en el fondo del arco mexicano.

Mención especial para Pablo Parra, quien jugó e hizo jugar a sus compañeros todo el tiempo.

Así las cosas, Martín Lasarte ya tiene materia para enfrentar el último empujón de las Eliminatorias para Quatar 2022, con jugadores que retoman la filosofía de la Generación Dorada, es decir, juego vertiginoso y llegar al área contraria con peligro.

Veremos qué hará Machete en el partido contra El Salvador.

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