Joaquín Niemann se está metiendo entre los grandes. Este fin de semana recién pasado ganó de manera notable el Genesis Invitational, que tenía en su field a todos los top 10, y consiguió su segundo título en el PGA Tour.
Tan relevante es el torneo, que «Joaco» dio un importante salto en el ranking y subió al puesto 20, la mejor posición histórica de su carrera.
En medio de este gran presente del jugador nacional, Silvia Bertolaccini, ex golfista argentina y otrora comentarista de este deporte por 28 años en ESPN, conversó con Emol sobre el cierre del torneo de Niemann y sus proyecciones.
-Fue un final dramático, con Cameron Young y Collin Morikawa acechando con fuerza…
«Por suerte no se le escapó. En un momento cuando llevaba cinco golpes de ventaja, parecía que era imposible que no ganara. Sin embargo, como pasa siempre, los últimos hoyos no son fáciles. Si es que Morikawa hubiese embocado ese putt en el hoyo 18, le hubiera dado un golpe solamente de ventaja a Niemann. Creo que es una enseñanza: Todas las ventajas se pueden descontar».
-El domingo dio la sensación que no jugó su mejor golf, pero aún así tuvo la fuerza para amarrar la victoria.
«El fin de semana, para los líderes, es siempre una presión adicional. Y el domingo ni te cuento. Es una cancha que no es sencilla. ¿Cuántos buenos jugadores se quedaron fuera? Dustin Johnson, Brooks Koepka, que son de los mejores. Entonces es una cancha que no te perdona cuando cometes errores. También seguramente tuvo un poquito de nervios, pero cuando lo necesitó, respondió. Por ejemplo, el drive que pegó en el 18 fue clavado en el medio del fairway. Hizo lo que tenía que hacer cuando lo necesitaba. El torneo era de él si hacía par-par y jugó con esa cabeza».
-Tras este trofeo, ¿a qué cree usted que puede aspirar Niemann?
«Esta es su segunda victoria. Acaba de ganar en una muy buena cancha de golf y contra los mejores jugadores. No faltó nadie. Todo esto es confianza. Pienso que tiene todas las condiciones para volver a ganar este año y ya no me sorprendería si puede ganar un Major.
Está hace cuatro años en el Tour, se ha acostumbrado a las canchas, al público y estar con la presión. Eso ya lo pasó. Si lo ponemos en una situación de más estrés como sería un Major, ya sabe cómo comportarse y creo que sabría resolverlo si se dan las cosas. Mentalmente ya está listo para ese próximo salto. Hoy puede hacerlo. (…) El haber ganado el torneo con Tiger Woods dándole el trofeo, que haya hablado muy bien de él y en fin, todo es positivo para Joaquín.
Mentalmente y su juego dan para eso (ganar un Major). No le falta nada. Este es el momento, porque el golf es así, viene y va. Es cosa de ver a Rory McIlroy, a Jordan Spieth, Jason Day, Rickie Fowler. De golpe, el golf te puede dejar de lado. Ahora el juego a Joaquín lo está invitando a mejor. Lo veo listo para el salto».
-Muchas veces también el hincha es muy exigente…
«Es cierto, la gente siempre espera más. Y el golf es un poco desgraciado en ese sentido para el fanático. Porque si ganas tres torneos en un año, es un súper buen año. Y te imaginas a los fanáticos que dicen: ‘Vi 30 torneos este año y solo ganó tres’. Pero eso no lo hace casi nadie. Es más fácil, por ejemplo, ser hincha de Roger Federer en el tenis que ganaba casi todas la veces que jugaba. Tiger fue la excepción y por eso Tiger es Tiger. Pero hoy en día nadie».
Fuente: Emol
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