La Selección Chilena podría vivir un nuevo cambio de timón en las próximas horas. La continuidad de Ricardo Gareca pende de un hilo y, en caso de una derrota ante Bolivia en El Alto este martes, la ANFP ya tiene un nombre que genera consenso como reemplazo interino: Gustavo Álvarez.
El actual técnico de Universidad de Chile ha sido propuesto por Pablo Milad como una carta fuerte para asumir La Roja de cara a los decisivos duelos ante Brasil y Uruguay en septiembre, por las últimas fechas de las Eliminatorias rumbo al Mundial 2026.
Un interinato “compatible” con la U
La fórmula que baraja la ANFP consiste en que Álvarez asuma de manera interina exclusivamente para los dos partidos mencionados, sin abandonar su actual proyecto en la U. La apuesta es que Azul Azul permita compatibilizar ambos roles, al tratarse de un periodo acotado.
Sin embargo, desde Universidad de Chile niegan tajantemente esa posibilidad, generando fricción entre ambas instituciones. La concesionaria azul considera inviable que el entrenador divida su foco en una etapa clave del torneo nacional.
Alternativas y presión del tiempo
Aunque nombres como Nicolás Córdova (actual DT de la Sub-20) y Sebastián Miranda han sido evaluados como opciones transitorias, Córdova ya ha descartado públicamente asumir un interinato. Eso deja a Álvarez como la principal carta para liderar un eventual recambio inmediato.
La dirigencia valora su liderazgo, estilo de juego y conocimiento del medio local, considerándolo incluso como un posible técnico de largo plazo con miras al proceso hacia el Mundial 2030.
La decisión final dependerá del resultado en Bolivia y del margen de negociación que logre la ANFP con Azul Azul. Mientras tanto, el llamado “Plan Álvarez” avanza silenciosamente y podría marcar un giro clave en el manejo de las selecciones chilenas.
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