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Sexo y deporte: cómo la vida íntima influye en el rendimiento físico

La relación entre sexo y deporte ha sido objeto de debate por décadas. ¿Tener relaciones sexuales antes de competir mejora o perjudica el rendimiento? ¿Influye en la fuerza, resistencia o enfoque mental? Hoy, la ciencia entrega respuestas más claras que ayudan a derribar mitos y promover un enfoque más saludable y equilibrado.

Diversas investigaciones, incluidas revisiones publicadas en revistas especializadas como Frontiers in Physiology y Journal of Sports Medicine, coinciden en que la actividad sexual no tiene efectos negativos significativos en el rendimiento físico si se realiza al menos 10 a 12 horas antes del ejercicio intenso. En algunos casos, incluso puede tener beneficios psicológicos, como la reducción del estrés y una mejor calidad de sueño.

“Siempre se pensó que el sexo antes de una competencia podía ‘debilitar las piernas’, pero eso no tiene sustento científico sólido”, comenta la kinesióloga deportiva Carolina Espinoza. “Lo que sí es cierto es que, si implica trasnochar, beber alcohol o un desgaste emocional, entonces sí puede interferir, pero no por el sexo en sí”.

Beneficios y recomendaciones

Entre los efectos positivos que se han identificado, destacan la mejora en el estado de ánimo, la liberación de endorfinas, y la regulación de ciertas hormonas como la testosterona, que puede ser beneficiosa para el desempeño físico en hombres.

Sin embargo, expertos recomiendan considerar el contexto: no todos los deportistas reaccionan igual, y factores como el tipo de deporte, el momento del ciclo menstrual en mujeres, el estado físico y emocional, y la cercanía con la competencia, pueden modificar los efectos.

En deportes de alta exigencia o concentración, como el atletismo, la gimnasia o las artes marciales, algunos entrenadores prefieren evitar distracciones y mantener una rutina estricta. En otros casos, como el fútbol o el levantamiento de pesas, no se han evidenciado efectos perjudiciales notables.

Conclusión:
Lejos de los tabúes, el sexo puede formar parte de una vida deportiva saludable, siempre que se mantenga el equilibrio y se considere el contexto personal y competitivo. Como en todo entrenamiento, la clave está en conocer el cuerpo y respetar los tiempos de recuperación y descanso.

@EstudioEstadio

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