Tras la dura derrota ante Universidad de Chile en la Supercopa, y las dudas generadas en torno al funcionamiento colectivo, Colo Colo necesitaba una respuesta urgente. La encontró este viernes, en el estadio Monumental, con una goleada por 4-0 sobre Deportes Iquique, en duelo pendiente de la fecha 23 del Campeonato Nacional.
El partido marcó el estreno del técnico argentino Fernando Ortiz como local y en el torneo de Primera División, luego de asumir con la misión de levantar a un plantel golpeado. La victoria no solo representa un alivio en el convulso año albo, sino que también devuelve la ilusión a una hinchada que exigía un cambio de rumbo.
Cambio de actitud y primera muestra del «efecto Ortiz»
Con apenas unos días más de trabajo, el equipo mostró una mejor versión futbolística, a pesar de las numerosas bajas: Alan Saldivia, Alexander Oroz, Óscar Opazo, Esteban Pavez, Sebastián Vegas y Javier Correa, además de varios jugadores convocados a la Selección Sub 20.
Pese a estas ausencias, Colo Colo realizó su mejor primer tiempo en meses. La presión alta, la intensidad por las bandas y una recuperación rápida del balón permitieron encerrar a Iquique durante largos pasajes de la primera etapa.
Arturo Vidal, eje silencioso del mediocampo
Una de las claves del buen rendimiento fue la ubicación táctica de Arturo Vidal, quien jugó más contenido, lo que permitió que Vicente Pizarro y Leonardo Gil (Méndez) tuvieran mayor libertad para sumarse al ataque.
Desde temprano, Mauricio Isla y Lucas Cepeda profundizaron por el costado derecho, generando peligro constante. A los 3 minutos, Isla tuvo la primera gran chance con un cabezazo que exigió al portero Daniel Castillo. El «Huaso» recuperó protagonismo, apareciendo como extremo y siendo constantemente habilitado con pases filtrados.
Avisos antes del gol y una justicia al marcador
Pese al dominio, el marcador se mantuvo en cero durante buena parte del primer tiempo por la falta de precisión en la definición. Un remate lejano de Vidal que rozó el travesaño (29′) y un disparo de Aquino al poste (33′) fueron señales del peligro latente.
Finalmente, en el minuto 38, llegó la recompensa: Marcos Bolados, uno de los jugadores más criticados por la hinchada en el último tiempo, rompió el cero. Recibió un pase de Vicente Pizarro, encaró y sacó un remate que venció al arquero Castillo para marcar el 1-0 parcial.
Iquique sin respuesta ante la superioridad alba
Deportes Iquique, último en la tabla, no logró responder al ritmo del local. Solo logró salir del asedio en el minuto 20 con un contragolpe encabezado por Puch y Pino, pero más allá de eso, fue ampliamente superado. El equipo nortino defendió muy atrás y no logró sostener la posesión cuando recuperaba el balón, lo que facilitó la presión del Cacique.
Ficha de partido
Colo Colo: F. De Paul (61′, E. Villanueva); M. Isla (83′, B. Gutiérrez), J. Villagra, E. Amor, E. Wiemberg; V. Méndez (83′, T. Alarcón), A. Vidal, V. Pizarro; L. Cepeda, C. Aquino (83′, L. Hernández); y M. Bolados (88′, M. Clerveaux). DT: F. Ortiz.
Iquique: D. Castillo; M. Blázquez, L. Casanova, S. Sánchez, M. Jorquera (60′, A. Venezia); M. Moya (46′, C. González), C. Fuentes (60′, H. Salinas), M. Gómez (60′, B. Soto), M. Dávila; E. Puch y S. Pino (72′, A. Henríquez). DT: F. Díaz.
Goles: 1-0, 38′, Bolados, arranca en dirección al arco y define tras pase de Pizarro; 2-0, 64′, Isla, define tras un remate en un poste; 3-0, 81′, Aquino, de penal; 4-0, 86′, Vidal, saca un tiro en doble instancia.
Incidencia: 74′, Puch se perdió un penal.
Árbitro: Juan Lara. Amonestó a Villagra, Alarcón (CC); Salinas (IQ).
Estadio Monumental. Asistieron 19.994 personas.
Conclusión
Colo Colo mostró señales claras de recuperación bajo la conducción de Fernando Ortiz. La victoria por 4-0 ante Deportes Iquique no solo fue importante por los tres puntos, sino porque devolvió confianza a un equipo que había perdido el rumbo futbolístico.
El nuevo DT comenzó con el pie derecho en casa y ahora el desafío será mantener esta línea, recuperar a sus lesionados y escalar en la tabla para volver a meterse en la lucha por copas internacionales. En un año con más sombras que luces, el Monumental volvió a celebrar.
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