Joaquín Niemann continúa demostrando que es uno de los jugadores a tener en cuenta en el circuito. Este jueves, en el comienzo del The Genesis Invitational, en California, el talagantino consiguió que el mundo pusiera los ojos sobre sus golpes: una primera ronda con una tarjeta de -8, nueve birdies y un sólido liderato. Una actuación brillante.
Cerca de las 17.00 horas, Joaco hizo su ingreso al histórico Riviera Country Club. De entrada, dio muestras de que quería ser el mejor entre los mejores del mundo que estaban presentes: birdie en el hoyo 10 y 11. El tropiezo con un bogey en el 12 no mermó su juego, porque el golfista de 23 años reaccionó rápidamente con otro birdie en el 13, para volver a estar dos golpes bajo el par. Y para cerrar la primera mitad de su recorrido, hizo birdie en el hoyo 16 y 17. A esas alturas, ya estaba en T3.
En el segundo tramo, Niemann mostró hambre, fue todavía por más y tuvo premio. Consiguió birdies en los hoyos 1, 4, 5 y 7, para acabar el día con ocho golpes bajo el par y unos merecidos aplausos. Se retiró del campo como líder absoluto de un torneo que está pensado para que participe la elite del golf mundial, y que reparte US$12 millones en premios.
La performance de Joaco fue tan increíble que hasta pudo sacar tres golpes de distancia con sus más cercamos perseguidores, que finalizaron con -5. Se trata de los estadounidenses Scottie Scheffler, Jordan Spieth, Cameron Young y Max Homa.
Un irregular Mito
Guillermo Pereira también vio acción este jueves en California. El santiaguino completó una irregular jornada, pero consiguió acabar en su estreno con un golpe bajo el par, lo que lo deja bien perfilado para este viernes.
Mito saltó al campo antes que Niemann y no tuvo un inicio fácil: bogeys en los hoyos 12 y 15. Sin embargo, supo reaccionar a tiempo y obtuvo una racha espectacular de tres birdies seguidos, en el 17, 18 y 1. El chileno estaba otra vez en carrera y era T35.
Un bogey en el hoyo 4 cortó su buen tranco, pero Mito logró un birdie en el 7 para finalizar el día con -1 en su tarjeta, metido entre los 50 mejores, con el deseo de cortar su mala racha en la que no ha podido pasar el corte en los últimos dos torneos disputados.
Original de La Tercera
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