La disputa entre Arturo Vidal y su primo Carlos Albornoz está en pleno desarrollo. Partió con la querella por administración desleal y celebración de contrato simulado que el volante del Inter de Milán y la Selección interpuso en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago con el fin de establecer a los responsables de un daño patrimonial que se acerca a los US$ 5 millones y continuará con las diligencias que ordene el mencionado tribunal con la finalidad de determinar la eventual comisión de los delitos que expone la defensa del Rey.
En el escrito presentado por los representantes legales de Vidal, Carlos Berríos y Cristóbal Basaure, se consignan acciones específicas para intentar esclarecer los hechos que motivan la acción judicial y, sobre todo, para determinar las culpabilidades que persigue.
En esa línea, el enfoque está puesto en la administración de las dos sociedades en que Vidal y sus asesores encontraron las mayores irregularidades. De ahí que dos de las peticiones estén orientadas a transparentar lo más posible la gestión de ambas empresas. La primera es la que debería arrojar las mayores señales. El Rey pide al tribunal que ordene la realización de un peritaje contable de las sociedades Inversiones Vidal II SpA y Área 23 SpA, “con el objeto de establecer fehacientemente la cuantía del perjuicio irrogado por los querellados, aspecto relevante para la determinación de la pena”. La segunda está directamente relacionada. “Ordenar la exhibición de los documentos contables y financieros de ambas Sociedades”, requiere.
De la cancha al banquillo
Albornoz ha declarado que la comunicación con Vidal se cortó el día en que comenzó la disputa legal y que ahora el entendimiento es formal, a través de sus respectivos abogados. Sin embargo, habrá una oportunidad para que se vuelvan a ver las caras: el día en que el juzgado los cite a comparecer en audiencia. Antes, tendrán que entregar sus declaraciones por separado, conforme a la lista de diligencias que la defensa del futbolista le solicitó al tribunal.
Concretamente, los representantes legales del seleccionado chileno le piden al tribunal “que despache una instrucción particular a la Brigada de Delitos Económicos de la Policía de Investigaciones para que realice todas las diligencias necesarias para el esclarecimiento de los hechos”. Es ahí donde surge la nómina de las personas que se consideran claves para la investigación, por la cantidad y calidad de los antecedentes que pueden aportar en el marco de las indagatorias.
El primer mencionado, en calidad de imputado, es Carlos Albornoz. El currículo del que hasta hace poco era la mano derecha del volante es, a estas alturas, materia de dominio público. Psicólogo laboral, magíster en Negocios, doctor en Desarrollo de Recursos Humanos y Gerente de Personas en TL Limitada, según consigna su cuenta en Twitter, el profesional era el encargado de administrar las inversiones que el Rey realizaba en un contexto ajeno al vínculo con los clubes y a la relación con las marcas, que siguen al alero del representante del volante del Inter de Milán, Fernando Felicevich. La alta confianza que tenía Vidal en él justifica el rol protagónico que tenía en sus empresas y ahora, en sentido contrario, la decepción que siente el deportista por el manejo de ellas.
Albornoz, al ser contactado por El Deportivo, se refirió a la citación que le realizará la justicia. “Todos saben que nosotros no queríamos llegar a esta instancia. Lo que menos deseamos siempre es entrar a un proceso judicial, porque al final de este tipo de cosas perdemos todos. Pero ya que estamos en esta circunstancia, a mí me reconforta que la justicia comience a investigar, porque si los fiscales hacen un peritaje contable de las sociedades Inversiones Vidal II SpA y Área 23 SpA va a quedar claramente demostrado que no hay daño patrimonial alguno a Arturo y al contrario quedará acreditado que el club, pese a las vicisitudes que pudimos tener producto de la pandemia, es un buen negocio ahora y mucho más lo será en el futuro”, comienza diciendo. “En un análisis de este tipo es muy importante considerar que hay pasivos y activos y ambos elementos son los que hay que considerar en cualquier negocio, especialmente en el caso de un club como este que prácticamente quedó paralizado en los casi dos años que duraron las restricciones sanitarias”, agrega-
“Espero sinceramente que una vez que la fiscalía haga las indagatorias, quede demostrado el error que están cometiendo los querellantes. Hay que entender que una cosa son los flujos del negocio y otra distinta es el patrimonio ganado, patrimonio que hemos hecho crecer, generando ROI (Retorno sobre la Inversión) positivo para Arturo”, cierra Albornoz.
El segundo, es Vidal, en condición de victima. Ambos, naturalmente, tendrán que explicar los motivos que originan la disputa y entregar la mayor cantidad de antecedentes posibles para acreditar sus respectivas posturas.
Luego, la defensa del futbolista da paso a la lista de testigos. La abre José Andrés Jara Garay, jefe de Administración y Finanzas de Área 23 SpA desde abril de 2014, cargo que ejerció a tiempo completo, según lo que informa en su perfil en Linkedin. En la misma red, Jara se describe como “contador con 8 años de experiencia en manejo de jefatura de Tesorería , Contabilidad y RRHH, para empresas del rubro deportivo”. Antes, de hecho, ejerció en otra sociedad, Del Inca Sociedad de Inversiones Limitada, vinculada a Iván Zamorano. Se desvinculó voluntariamente de la empresa ligada a Vidal después de presentar sucesivas licencias médicas.
El segundo citado es Miguel Ángel Ilufin Olea, otro ex trabajador del club, quien optó por el autodespido como figura para la desvinculación, señalan cercanos al proceso que se lleva a cabo.
El círculo de confianza
La lista la completan Ámbar Vidal Pardo, hermana del astro de la Roja, y Francisca Araya Villagrán, quien forma parte del círculo de mayor confianza del Rey. Ámbar Vidal ha desarrollado varios negocios con su hermano, con quien la une un especial lazo afectivo. Una inmobiliaria, una corredora de propiedades, un hostal y una distribuidora forman parte de esas inversiones, agrupadas en la denominación Vipar, que alude a los apellidos de ambos: Vidal Pardo. La hípica es otro ámbito que los vincula, pues el futbolista le ha regalado ejemplares para que compitan en Concepción, donde está radicada y mantiene negocios.
Araya aparece en los registros de la ANFP como la presidenta del Rodelindo Román, el club que Vidal financia y que participa en la Segunda División, la tercera categoría del fútbol chileno. Sin embargo, aún no ha asumido en propiedad todos sus roles. En el grupo de WhatsApp que convoca a todos los timoneles de los clubes de la categoría, por ejemplo, sigue estando Carlos Albornoz, aunque no ha intervenido en las conversaciones desde que estalló el conflicto con el ex jugador del Barcelona.
En ambos casos, según fuentes vinculadas a la investigación, no existe vinculación con la administración de Vidal II SpA ni de Área 23 SpA, las sociedades que motivan el enfrentamiento.
El segundo otrosí consigna los documentos que acompañan la presentación. Entre ellos figuran la constitución de la sociedad Inversiones Vidal II SpA, sucesora de Inversiones Vidal SpA, con fecha 7 de noviembre de 2013 y las copias de dominio vigentes de los lotes 1 y 2 y de las parcelas 21 y 22 del Fundo El Algarrobal I.
Original de La Tercera
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